las cuevas de esa bruja eran tan enormes que en ellas me perdi....tanto que me dormi ...a las orillas del mar vi que me veia mas que olerme y eso me gustó; y en su cama bebí en sus ojos que son como cuencos de agua .......pozos de gozo profundos....y que si dejo de beber ...dijo el Sevillano...el cantaor de mi alma......me vuelvo loco....amo sus huesos sabes?
cerro sus ojos y la mujer se rio..con su pelo alzado en la nuca con un desdén tal entre vulgar y frio pero calor de cadera....era Triana serena
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